lunes, 7 de noviembre de 2011

"El tío de la tiza" y Javier Osuna

Mañana martes sobre las ocho de la tarde, en la Peña El Quini (C/ Pericón de Cádiz), el periodista / investigador / productor / autordecarnaval Javier Osuna García dará una conferencia para el Aula de Cultura del Carnaval de Cádiz sobre Antonio Rodríguez Martínez, más conocido como "El tío de la tiza". Aprovecho la ocasión para animaros a ir y comentaros algunas novedades de las que me he enterado hace escasos momentos. Osuna está ideando para 2012 un congreso sobre la figura del gaditano, puesto que el año que viene se conmemoran cien años de su fallecimiento. A su vez, ha solicitado a la alcaldesa de la ciudad una placa en el nº7 de la calle Rosario Cepeda, casa natal de Rodríguez. También ha presentado ante la Asamblea de Antifaces de Oro -que preside Joaquín Quiñones-, la solicitud de Antifaz de Oro de manera póstuma para el autor, entre otros, del tango de "Los duros antiguos". Desde aquí, todo nuestro apoyo a dichas iniciativas.

Portada del libro editado en 2007.

Os dejo a continuación la reseña que escribí sobre el libro de Osuna García sobre "El tío de la tiza" para la revista Ubi Sunt?:

El Tío de la Tiza (1861-1912). Revisión biográfica de Javier Osuna García
Por Santiago Moreno Tello, Universidad de Cádiz

Datos de interés:
Edita: Caja San Fernando
ISBN: Edición no venal.
685 páginas
Año: 2007

Estamos una vez más ante un trabajo que sirve como ejemplo para afirmar que la Historia nunca está del todo escrita. Así se ha demostrado el error en el que se encontraban unos datos que varias generaciones han ido aceptando como válidos, siendo esto posible gracias al tesón, la energía y la inteligencia de un investigador.

A mediados de los años 90 ya le rondaba a Osuna García la hipótesis de la existencia de fallos en la biografía del afamado comparsista de finales del siglo XIX y principios del XX, Antonio Rodríguez Martínez “El Tío de la Tiza”.

El estudioso Ricardo Moreno Criado había publicado en 1980 un pequeño libro sobre su vida y su obra, y como bien se nos indica en esta Revisión biográfica, mientras en la parte dedicada a la obra, el aporte de Moreno Criado fue impagable, no ocurre lo mismo con la biografía en sí. Le honra a Osuna García, y es de agradecer, la defensa a ultranza que hace aun así de la temprana edición, a destacar por la desértica producción dedicada al folklore gaditano que había hasta ese momento. Las dudas que se planteaba Osuna García hicieron que se embarcara en un camino un tanto farragoso y apenas lleno de satisfacciones, como por otro lado suele ocurrir en el campo de la investigación (sin desperdicio la anécdota en la introducción del libro sobre Perinéfilo).

Así se nos presenta la obra con una estructura quizás algo clásica, pero sin duda necesaria, pues a partir de ella le es más fácil al autor construir el rompecabezas que finalizará con una biografía completa y llena de matices. Como aquél que va al encuentro de la aguja del pajar, Osuna García se llega adentrar hasta mediados del siglo XVII en búsqueda de los antepasados de Rodríguez Martínez. Esto, sin duda, es acto reflejo de los posibles reproches que durante años recibió el autor al exponer la idea de que el afamado comparsista difícilmente había nacido en 1833 en la villa de Conil de la Frontera, como por cierto, logra desmontar de manera magistral.

Conforme avanzan los capítulos, logramos descubrir muchos momentos de la vida de El Tío de la Tiza hasta ahora desconocidos,  tales como pueden ser su formación personal, su ocupación laboral –con el interesante capítulo dedicado a la Cooperativa Gaditana de Fabricación de Gas-, su círculo de amistades –con el retrato de la Tienda de La Lonja-, sus relaciones sociales –a través también de su pertenencia al Círculo Modernista, del cual fue presidente-, o su marcha a Sevilla por motivos laborales y para continuar su carrera carnavalesca, que porqué no decirlo, ya sin el éxito que siempre le acompañó en Cádiz.

No podemos dejar de hacer alusión en unas líneas a los apartados dedicados a sus comparsas. En dichos capítulos Osuna García utiliza, en primer lugar, las que ya en su momento Moreno Criado seleccionara en su libro. A estos datos se le suman los arrojados por el Archivo Histórico Municipal de Cádiz, así como los de la colección privada de Marcos Zilbermann. De esta manera la primera agrupación de la que se nos habla es la, hasta ahora desconocida, “Escuela Taurina” de 1885. El autor también aclara de manera magistral los variados años en los cuales aparecieron en las calles de Cádiz “Los Viejos Cooperativos”. Pero no sólo se incorpora al listado de agrupaciones de Rodríguez Martínez comparsas desconocidas, como la ya citada “Escuela Taurina” o “Los Langostinos”, si no que además vuelca en el libro todos los repertorios que tiene entre sus manos. Llegamos a conocer proyectos de comparsas que El Tío de la Tiza ideó -ya desde su vivienda sevillana-, para que cantasen en Cádiz, como pudieron ser “El Arco Iris” o “Gaditanos del Siglo XX”, que finalmente no llegaron a salir. También se muestran las agrupaciones que sacó en los carnavales sevillanos y, con los datos obtenidos, se puede afirmar que si bien no era la primera vez que comparsas del autor actuaban en la capital andaluza, no deja de ser cierto que estas últimas nunca llegaron a gozar del éxito de las anteriores.

Nos gustaría destacar para finalizar, por un lado, el anexo biográfico de muchos de los componentes de las comparsas reseñadas, el cual se incluye al final del libro. Estudio sin duda muy útil para futuras investigaciones, y que Javier Osuna también realizó para su publicación Cádiz, cuna de dos cantes. Por otro lado, indicar que el Aula de Cultura del Carnaval de Cádiz ha galardonado este libro con su Premio de Investigación.

Obra de volumen considerable, en la cual redescubrimos a un gaditano que aunque quizás no tuviera una alta formación académica, no dejó de ser una persona interesada por todo lo que le rodeaba. Su obra carnavalesca, así como su continua intervención en la vida cultural gaditana, nos hace conocer a un Antonio Rodríguez Martínez activo, con un inusitado gusto por lo musical, innovador, así como con un hombre ciertamente comprometido. Al menos culturalmente hablando.


Texto publicado originalmente en Revista de Historia Ubi Sunt? nº22, ISSN 1139-4250, 2008, págs. 128 y 129.

3 comentarios:

  1. Grandes botellones me he tomado en la Plaza que lleva su nombre!!

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  2. Lo que más me gusta de la plaza del "El Tío de la Tiza" son las caballas asadas que como en verano cuando visito nuestra tacita de plata. Un abrazo a todos los gaditanos desde Francia..

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  3. Don Antonio, bienvenido a este blog. Espero que nos veamos pronto. Un abrazo.
    Don Pretoriano, ¿para cuando una actualización de su blog?

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