miércoles, 20 de marzo de 2013

¿No hay otro sitio pa´la maceta?

Calle Sopranis. La que en otro tiempo fuera una de las principales calles comerciales de la ciudad. Sólo hay que ver las artísticas fachadas que hay en su tramo central. La calle Nueva o Ancha del siglo XVII. Antes, claro, que las familias acomodadas decidieran desplazarse a otros lugares que se iban construyendo en la ciudad.
Mucho tiempo después, a mediados del siglo XX fue uno de los centros del estraperlo. Así nos lo recordaba Antonia Gil Pérez:

Soperanis en su cruce con La Gloria.
"[el pan] se vendía en la calle Botica, Soperanis, Mirador, por tos laos [...] la guardia Urbana daba la vuelta por el Barrio y donde había allí iban. Muchas veces la dueña del traspelo lo gratificaban y se callaba. Mi marido de Guardia se iba a Soperanis y decían las estraperlistas del pan, que se los daban los mismos del horno, que hacían más de la cuenta. Las mujeres en Soperanis con los canastos llenos, se ponían unas pocas, y decían hoy está aquí Juanillo el Guardia, verá tu como vendemos to el pan, y así pasaba, porque hacía la vista gorda.”(1).
Y en una calle con tanto estilo... ¿es normal que se plante una maceta justo en el azulejo que indica uno de los nombres de sus calles perpendiculares? Precisamente la que hace referencia a una empresa perteneciente al mundo de la bollería y el pan. ¡¿No hay sitio en toa´la paré!?


(1) En MORENO TELLO, S. La clase obrera gaditana (1949-1959): Una historia social a través de las fuentes populares. Universidad de Cádiz. Cádiz, 2006. Pág. 39.

2 comentarios:

  1. Qué bonita y qué triste historia a la vez. 'Qués' cobazo y qué genio despliega un estómago con hambre y qué monumento había que hacerle a esas mujeres luchadoras. La maceta, como las madroñeras y las ninfas, me temo que es un caso perdido, sobrino.
    Un abrazo.

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